sábado, 17 de septiembre de 2011

De cuentos

Cuéntame algo que me mantenga atada a esta realidad.
Algo para que él no me lleve de vuelta a su mundo.
Cuéntame una historia que dure dos eternidades.
Una para huir y la otra para esconderme.
Cuéntame tu historia. De a poquitos.
O la de él para no acobardarme. Para entenderle.
Regálame un par de minutos más a tu lado.
Distraéme para no volverme loca recordando.
Manténme ocupada para ignorarlo.
Solo siéntate aquí, a mi lado.
Solo cuéntame una historia.
El resto lo imaginamos juntos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario