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miércoles, 17 de julio de 2013

De chicas

Quiero ser la razón por la que trasnochas, la excusa que te mantiene despierto por las noches, la conversación que repasas una y otra vez para detectar las sutilezas que se te escaparon mientras hablabas, la razón por la que aún estás despierto, leyéndome.
No quiero ser la chica con la que sueñas, esa que solo mientras duermes logras alcanzar, esa que no tiene un timbre de voz definido porque nunca la has oído hablar. No quiero ser la chica perfecta esperando a ver si algún día sueñas conmigo.
Quiero ser la chica que está a tu lado, con la que puedes tener conversaciones imaginarias porque ya sabes como va a responder, la chica que te saca la lengua y siempre anda despeinada. La chica que está demasiado ocupada siendo para preocuparse por parecer perfecta. La chica a la que estás tan acostumbrado que simplemente no te imaginas como puede una vida estar completa sin ella.
Quiero ser esa chica.

viernes, 10 de mayo de 2013

De esperanza

Para alguien a quien quiero y a quién debí haberle dicho esto y mil cosas más:
Sé que te duele.
Miento, no lo sé. Nunca he estado en tu posición y no sé cuanto te dolió.
Sólo quiero decirte que va a dejar de doler. Que ese horrible cliché del tiempo lo cura todo es cierto. Y tú tienes a tanta gente que te quiere, que te ama, que te adora, una familia que te apoya. Tienes todos los ingredientes para superarlo.
La gente olvida, somos seres moldeables, adaptables, nos adaptamos a las circunstancias y a veces el precio de esa moldeabilidad es negar, enterrar todo lo que nos lastima, a veces requiere olvidar, empezar de cero. En un par de años será un recuerdo borroso, un mal sueño, todos nos preguntaremos si fue alguna vez real, pero nos dará igual la respuesta, no tenemos las cicatrices para recordarlo, pretenderemos y continuaremos con nuestras vidas, después de todo, que importancia tiene algo que nunca sucedió.
Pero para ti habrá sucedido, y lo recordaras durante toda tu vida y ta vez algún día cuando tengas 50 años sentiras una punzada de culpabilidad y tal vez lloraras por lo que nunca fue, pero tendrás un esposo e hijos hermosos para distraerte.
Y esta es mi manera de decirte que todo pasa, que la vida tiene su manera de hacer las cosas y nos equivocamos y la embarramos pero de alguna manera todo parece funcionar.
Esta es mi manera de decirte que todo va a estar bien, aunque tú ya lo sepas.

viernes, 12 de abril de 2013

De universos alternos

-¡Se quiere casar!
Eso fue lo primero que me dijo mi mejor amiga, ni hola, ni como estás, ni sientate.
Por supuesto yo que no tenía idea de que hablaba hice la pregunta más obvia y tonta posible-
-¿Quién?
-¿Cómo quién? Augusto obviamente.
De repente se aclaro todo el lío. Augusto, el único Augusto en su vida y en la mía, su novio, con el que llevaba 6 meses y al que conocía hace un año. Augusto se quería casar.
Como ese día claramente mis neuronas estaban de vacaciones hice una pregunta de la que no me enorgullezco y que me valió una mirada asesina
-¿Contigo?
-¡Pues sí conmigo!
La conversación continuó de esa misma manera, yo haciendo preguntas estupidas y ella contestandolas.
-Pero ¿ya? ¿ahora?
-Pues no ya ya, ¿en un año? ¿en seis meses? ¡Quién sabe!
-¿No sabes?
-¡Pues no! Cambié el tema enseguida y salí corriendo.
-¿Cómo así, te lo pregunto?
-¡¡No!! ¿Cómo se te ocurre?
-Pues estás haciendo un escandalo
-¡Porque llevamos 6 meses! ¡Ni lo conozco! ¡Y se quiere casar! ¡Conmigo!
Sabía que me iba a llevar otra mirada asesina, además sabía cuál era exactamente el problema, pero no pude evitar que las siguientes palabras salieran de mi boca
-Y el problema es...
-Que tengo 24 años, veinticuatro. Y no me quiero casar.
-Ahhh eso.
Mi manera de contar las noticias fue por supuesto un poco más calmada.
-Martín quiere tener un hijo
Ahora era su turno de hacer preguntas estúpidas
-¿Contigo?
-No sé
-¿Cuando?
-No sé
-¿Qué sabes?
-Solo dijo eso. Quiere tener un hijo. No dijo cuando, ni con quién.
-Uao.
-Puedes repetir otra vez eso de que solo tenemos 24 años.
-Pero que piensan de la vida
-No sé
-¿O somos nosotras las que estamos mal?
-¿Por no querer entrar a un compromiso que dura toda la vida a los 24 años? Sí, seguro somos nosotras las que estamos terriblemente equivocadas.
-Aún no lo supero.
-¿En que momento cambió la situación? ¿No eran las mujeres las que perseguían a los hombres para casarse? Y aquí estamos tú y yo muertas del miedo porque se atrevieron a mencionar posibilidades.
-Ajajajaajaja. Necesitaba reirme. Tienes razón.
-Siempre la tengo
-Pues puedes entonces darme una respuesta que tenga más sentido que soy muy joven.
-Bueno, siempre está la posibilidad de irse del país.
-Sí, esa es una buena idea.
-¿Qué vas a hacer?
-¿Hablar las cosas con calma? ¿Evitar el tema? ¿Evitarlo a él? No sé ¿y tú?
-Pues preguntar, las mujeres dicen cosas como esas todo el tiempo ¿no? Quiero casarme y tener hijos. A veces no significan nada.Tú deberías hacer lo mismo. Preguntale. No te va a obligar a casarte.
-Ajajajaj lo sé. Pero me gusta, me preocupa que me convenza.
-Relajate. Si ese es tu mayor preocupación creo que todo va a salir bien.
-Gracias
-Cuando quieras.
Aun no me han contado el final de esa historia, pero en cuanto a mi, bueno, todos sabemos que hago tormentas en vasos de agua. Solo era mi imaginación.

sábado, 13 de octubre de 2012

De cuando algo se rompe.

En el futuro recordaría esa noche como el momento en el que se rompió algo.
No supo qué, ni cómo, estaba más preocupada por determinar si era el sonido de algo que se rompe para siempre o por el contrario una rotura por donde escapan cosas mejores.
Sabía que algo había pasado esa noche, tal vez había sobrepasado la cantidad de locura que él estaba dispuesto a tolerar, tal vez él había sido demasiado seco y demasiado parco en el peor momento posible, tal vez ambos soltaron al tiempo sin darse cuenta, sin entender que no podrían aferrarse el uno al otro de aquí en adelante.
Tal vez estaba siendo dramatica, lo cierto es que cuando se despidieron, cuando él puso su mano en su cintura y sus labios sobre los de ella, se le aceleró el corazón. Pudo sentir el calor de su mano sobre su cintura tiempo después de él haberse ido.
Bueno, a quién engañaba, su especialidad siempre había sido hacer tormentas en mares de lagrimas y huracanes en vasos de agua.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

De dolores de cabeza

Yo catalogo mis dolores de cabeza.
Lo sé, suena raro, pero lo hago.
Tengo dos categorías, piedras y burbujas.
Las burbujas no pesan, solo son molestas. Terriblemente molestas, pueden durar dos días completos, y no hay advil que valga. La ventaja es que son pequeñas, siempre. Son burbujas porque se mueven, es en serio, se mueven de un lado a otro.
Luego están las piedras, esas duelen. Pesan, no se mueven y aun peor crecen. Pueden durar una hora o un día completo. Las piedras son más interesantes, porque pueden no crecer y simplemente desaparecer después de dormir, o pueden crecer en figuras extrañas que igual desaparecen después de dormir, o simplemente no desaparecer.
El peor dolor de cabeza que tuve fue hace un año, en agosto del 2010. Fue un cuadrado verde, no me pregunten cómo sé, simplemente sé, era verde y era un cuadrado. Empezó normal, sin forma definida y fue creciendo, creció y creció todo el día. Probablemente debí haberlo notado antes y no ver televisión. No lo note. Y por primera vez en mi vida un dolor de cabeza se salió de mi cabeza. Tenía un cuadrado verde con una esquina apoyándose en el hemisferio derecho de mi cabeza y el resto por fuera. El hecho de que fuera un cuadrado y verde no me dejaba apagar mi cerebro, me preguntaba ¿por qué un cuadrado? ¿por qué verde? ¿por qué nunca antes había tenido triángulos morados o círculos rojos? No lo sé. Sé que fueron dos días muy malos, que no quería salir porque pensaba ¿que tal que me vean el cuadrado? ¿cómo voy a explicarlo? Por supuesto no era visible pero no caí en cuenta de ese detalle hasta después.
La razón por la que estoy hablando de dolores de cabeza es porque anteayer me levante con uno. Y mis dolores de cabeza siempre tienen límites, tal vez no forma definida pero siempre tienen límites. Este no, por primera vez dormir no apacigua el dolor, por primera vez tengo tres días con un dolor de cabeza. Tres días. Ayer no pude abrir mi ojo derecho, me dolía intentarlo. Llevo tres días con una cosa blanca que crece, se sale de mi cabeza y sospecho que va a seguir creciendo, temo por mi vida, por mi cabeza ¿qué tal que este solo sea una advertencia? ¿que cada año simplemente empeoren? ¿que algún día crezcan hasta volver todo mi cuerpo inútil? ¿qué pasa entonces?

lunes, 10 de octubre de 2011

Del sándalo

Por regla general no creo en lecturas de mano, astros, horóscopos, adivinos, hechizos y demás.
No creo.
Creo que es una bonita manera de ganar dinero, fácil gracias a lo crédulos que nos hemos vuelto.
Desde mi punto de vista, hay dos opciones o el destino es perfectamente inevitable (y entonces no tiene sentido siquiera intentar modificarlo) o no hay ningún destino (y si este es el caso, entonces ¿qué es lo que leen, adivinan o profetizan?)
Pero hoy por cosas de la vida estaba en un mercado de pulgas y por cosas de la vida un tipo de un stand "espiritual/esotérico" se dirigió a mi y a mi hermana, a mi hermana le hizo un bonito horóscopo con rasgos generales de su personalidad, lo normal en estas situaciones. A mi me dijo que estaba sucia, llena de malas energías que llaman, que alguien me envidiaba y que por eso las pulsaciones en la cabeza, las ganas de llorar repentinas y sin razón de ser y el sentir un celular vibrando.
Normalmente lo habría ignorado, de hecho es lo que hice.
Pero me queda la duda. ¿Cómo supo tantas cosas sobre mi?
Aún mejor ¿quién es lo suficientemente estúpido para envidiar a alguien que bajo todos los estándares de éxito actuales es una perdedora completa?

Por cierto me tomo a personal que a mi hermana le ofreciera semillas de mostaza para la protección y a mi semillas de mostaza y sándalo para el amor. No hay derecho a que uno lo discriminen de una manera tan vil.

martes, 20 de septiembre de 2011

A veces

A veces una persona te dice exactamente las palabras que debe.
A veces podría estar leyendo un guión escrito por ti.
A veces alguien puede simplemente decir todas y cada una de las palabras correctas y necesarias.
A veces todo lo que sale de su boca suena sincero.

A veces tú no te crees ni una sola palabra.


sábado, 17 de septiembre de 2011

De cuentos

Cuéntame algo que me mantenga atada a esta realidad.
Algo para que él no me lleve de vuelta a su mundo.
Cuéntame una historia que dure dos eternidades.
Una para huir y la otra para esconderme.
Cuéntame tu historia. De a poquitos.
O la de él para no acobardarme. Para entenderle.
Regálame un par de minutos más a tu lado.
Distraéme para no volverme loca recordando.
Manténme ocupada para ignorarlo.
Solo siéntate aquí, a mi lado.
Solo cuéntame una historia.
El resto lo imaginamos juntos.

sábado, 10 de septiembre de 2011

De cartas formales



















Estimado usuario:

Por medio de la presente nos permitimos informarle sobre recientes cambios en su cuenta personal en nuestro servicio.
Lamentamos informarle que su estado ha cambiado de "algún día" a "mientras tanto" lamentamos las incomodidades que este cambio de estado pueda ocasionarle sin embargo le recordamos que estos cambios no dependen de nosotros y son enteramente responsabilidad de los usuarios con los que usted se relaciona.
Esperamos nos disculpe por las molestias que esta carta pudiera causar.

Gracias por su atención.

El equipo de "Su Vida Amorosa Actual"

lunes, 5 de septiembre de 2011

De finales inconlusos

-No entiendo, si ya sabes el final de la historia ¿por qué la alargas?
-Porque no estoy lista para que me pierdas.
-¿Quién dice que ese es el final?
-23 años de experiencia en finales infelices.

De finales alternativos

-¿Por qué no puedo ser yo?
-De uno a diez, ¿cuánto me quieres?
-... siete? ocho tal vez?
-Necesito un diez si voy a saltar al vacío sin red de seguridad.

..........

-¿Por qué no puedo ser yo?
-De uno a diez, ¿cuánto me quieres?
-Veinte
-...
-¿Te sorprende?
-Me dejaste sin argumentos.

De regaños inútiles

Podría contarte una historia fantástica, aunque supongo que el adjetivo correcto es fantasiosa. No es fantástica.
La historia iniciaría con una niña siendo regañada, una niña en mitad de una biblioteca, una biblioteca gigante, delante de un padre severo, que está tras un escritorio apabullante, mientras ella está sentada en un sofá intimidante. Una niña demasiado pequeña para pertenecer a ese lugar. A primera vista no se nota, un poco de barro en los zapatos, el lazo un poco ladeado, una pequeña rasgadura en el vestido, son solo detalles, pero no pertenece a ese lugar.
Estaba jugando afuera. ¿Qué tiene de malo jugar afuera? Todos sus amigos lo hacen. Pero es que no son sus amigos. No importa que los quiera, que los extrañe cuando no los ve, que le guste jugar con ellos. Ella no pertenece afuera. Ya ha tenido esta conversación muchas veces. Demasiadas.
Sí, padre. No, padre. Sí, padre. Muy bien, padre. Ya sabe las respuestas de memoria, no necesita oír para saber que ahora mismo su padre está hablando sobre preservación y no dedicarse a malgastar su tiempo. Ha oído muchas veces sus "sugerencias" sobre como pasar el tiempo. Sabe el castigo usual también. Sí, padre. Hoy no se extenderá tanto, sabe que debe irse temprano y una vez él este fuera ella podrá volver a salir.
Tal vez la niña entienda eventualmente que no debe salir y aprenda como gastar su tiempo de una manera productiva. Tal vez aprenda a considerar las consecuencias de sus actos. Tal vez mañana ella cambie de parecer. Tal vez mañana el corazón deje de gritarle que salga. Tal vez mañana se dedique a leer adentro. Tal vez mañana pueda complacer a su padre. Tal vez mañana no se escape. Tal vez mañana pretenda durante todo el día que no le interesa en lo absoluto salir. O tal vez mañana tenga permiso. Tal vez mañana...

viernes, 2 de septiembre de 2011

De incertidumbres


Ella estaba convencida de que en sus brazos el tiempo se detenía.
Él de que teniéndola a ella no necesitaba más.
El estaba convencido de que con ella a su lado era mejor persona.
Ella de que sus abrazos lo curaban todo.
Lastimosamente nunca pudieron comprobarlo.

De explicaciones largas, engorrosas e innecesarias

Un beso en los labios para ahorrarnos la molestia.
A mi de mentir.
Y a ti de ignorarme.

lunes, 29 de agosto de 2011

De promesas

¿No te cansas de prometer siempre lo mismo?
¿De repetir una y otra vez las mismas promesas desgastadas, esperando que esta vez si te crea?
¿No te cansas?
Supongo que no.
No te culpo.
Te entiendo.
Yo también hago promesas esperando cumplirlas, yo también he prometido abandonar mi vicio sin lograrlo, también he dicho la próxima vez, esta vez, la última vez, no más y demás formulas varias. He prometido tantas cosas que ya me cansé de llevar la cuenta. Lo cierto es que he mentido. Toda promesa incumplida es una mentira. Aposta o no.
Hay una promesa que siempre me hago, "Never again". Nunca la cumplo, porque siempre cometo exactamente el mismo error cada vez y es bajar la guardia, siempre bajo la guardia cuando no debo.

jueves, 25 de agosto de 2011

De suicidios necesarios

Esta vez voy a saltar, sin paracaídas, sin red de seguridad, sin quizás, tal vez ni de prontos.
Voy a saltar con el único fin de romperme en mil pedazos.
Voy a saltar, sabiendo de antemano que al final del precipicio solo hay destrucción.
Voy a saltar sabiendo que es más que probable que no sobreviva al choque.
Y lo voy a hacer, no porque esté en una misión suicida, sino porque intento (¿o necesito?) que mi corazón vuelva a andar.

martes, 23 de agosto de 2011

En otro universo

-Me enamore de nuevo
-¿Otra vez?
-Sí. ya sé. De nuevo. Lo siento. No debí. Nunca debo, pero no lo hago a propósito, me crees, ¿cierto?
-Sí, creo que no lo planeas, pero te enamoras demasiado.
-Yo sé. Cúbreme ¿si?
-No puedes enamorarte cada mes, no es tan fácil cubrir ausencias tan seguido.
-¡Son las pastillas!
-¡Siempre es algo contigo!
-Voy a arreglarlo, sabes que no se demora mucho.
-Hay un límite y lo sabes, uno de estos días te vas a quedar enamorada y sin nada que hacer.
-¿Realmente crees en esas historias?
-Sólo no te enamores tan a menudo, pareciera que intentas poner a prueba todas las creencias.
-¡No exageres! Además que este es el último mes con las pastillas.
-Y tú crees que eso va a hacer una diferencia.
-Sé que son las pastillas, además, ¿qué tiene de malo enamorarse si es tan fácil de arreglar?
-Que entre más te enamores, más posible es que encuentres al Amor de tu vida.
-¡Cómo hablas! Tienes que hablar menos con tu abuela, es una buena señora pero tiene unas ideas extrañísimas.
-Así funcionaba antes.
-Sí, antes de que se pudiera arreglar, ¿quién dice que no puedes borrar al Amor de tu vida como al resto? es más ¿Quién dice que existe?
-Simplemente no te arriesgues. Ten cuidado.
-Siempre lo tengo.
-Eso dices.

viernes, 22 de julio de 2011

Adicción es decir nunca más, sabiendo que la próxima vez vas a decir, de nuevo, es la última.

Eres mi adicción.
No sé superarte, así que lo hago a las malas. A punta de distancia y tiempo a ver si por fin huir es la solución.
No lo es.
Lo descubro una y otra vez, a punta de caídas debería aprender.
Pareciera que el tiempo y la distancia no valen cuando eres tú.
Entonces te insulto, te miento, te odio, te lastimo, a ver si así, te alejas tú, pero yo soy tu adicción.
Y terminamos insultándonos, mintiéndonos, odiándonos, lastimándonos. Jugando a ver quién se rinde primero, quién se aleja primero, quién supera la adicción, por el momento.
Pareciera que solo podemos vivir lejos por momentos.
Entonces jugamos.
Se nos volvió un juego, hablar de nuestra adicción a ver si así la superamos, jugamos con fuego a ver si de tanto quemarnos nos alejamos, pero todas las heridas sanan y el juego siempre empieza de nuevo.